¿ Por qué dar el paso e invertir ?

Al principio, todo eso de la bolsa y los mercados puede sonar a chino: un mundo lleno de gráficas, términos raros y noticias que suben y bajan. Es normal sentirse un poco perdido cuando empiezas. Pero tranquilo, con un poco de tiempo y ganas de aprender, verás que no es tan misterioso y que, de hecho, puede ser una gran ayuda para hacer crecer tus ahorros de cara al futuro. En este artículo, vamos a ver por qué podría interesarte empezar.

La clave para invertir con cabeza no es ser un genio de las finanzas, sino entender unas cuantas cosas básicas: cómo funciona esto, qué se puede ganar y también qué riesgos hay. Da igual si lo que buscas es un dinero extra cada mes, asegurar tu futuro, ahorrar para la jubilación o simplemente que tus ahorros no pierdan valor por la inflación. Invertir en bolsa te puede acercar a esa tranquilidad económica que muchos buscamos.

Vale, pero… ¿qué es exactamente invertir en bolsa?

Seguro que te gustaría que tu dinero trabajara para ti, ¿verdad? Pues de eso se trata. Para conseguirlo, lo importante es saber en qué estás poniendo tu dinero y tener un plan claro, pensando en lo que quieres lograr a largo plazo. Por simplificarlo, la respuesta a "¿qué es invertir?" sería:

Invertir es destinar una parte de tu dinero a mercados como la bolsa, con la idea de que, con el tiempo, ese dinero pueda crecer y generar más dinero.

Una vez que tienes eso claro, lo siguiente es preguntarte: ¿para qué quiero invertir? Piensa en dos cosas sencillas pero importantes:

¿En qué momento resulta conveniente un plan

de inversión en ETFs ?

Un plan de inversión periódica en ETFs es adecuado cuando se busca construir un patrimonio de forma progresiva y con visión de futuro. La inversión recurrente permite activar dos poderosos motores de crecimiento financiero: el interés compuesto y la media de coste.

La media de coste asegura que, al invertir de manera automática cada mes, vas incluyendo mas capital mes a mes ,se adquieren más participaciones del activo seleccionado cuando su cotización es baja. Del mismo modo, cuando el mercado se revaloriza, puedes obtener beneficio en el momento de la venta, mejorando así la rentabilidad final.

El efecto del interés compuesto refleja el poder de reinvertir dividendos y rendimientos que vas teniendo a largo plazo. Los ingresos que se reinvierten compran nuevas participaciones, las cuales generan a su vez más rendimientos, que vuelven a reinvertirse, creando un ciclo continuo.

Si se mantiene en el tiempo, este proceso de retroalimentación puede llevar a acumular un patrimonio incluso superior al obtenido únicamente con las aportaciones iniciales. Como es bien conocido, el impacto del interés compuesto se intensifica cuanto más prolongado sea el plazo en el que actúa.

En resumen, lo que une a ambos principios es que, aunque en un primer momento sus efectos puedan parecer modestos, su capacidad multiplicadora tiene el potencial de incrementar significativamente el capital con los años.

Hace tiempo, esta labor era tan exigente como mantener un régimen estricto, pues demandaba constancia, disciplina y mucho tiempo. Sin embargo, la inversión automática en ETFs simplifica y automatiza el proceso de manera casi imperceptible, de forma que puedes ocuparte de tu día a día mientras tus ahorros crecen por sí mismos.

Aqui te dejamos un enlace para que puedas ver con la calculadora el rendimiento que te dará la inversion estimada en un plazo medio o largo.